España, Perú y Uruguay tienen algunas cosas en común. Entre ellas, considerar al turismo como importante.
Resulta que para España el sector turístico es el más importante para la economía del país. La actividad turística supone, de forma indirecta, alrededor de un 11,2% del PIB y aporta un 13% del empleo.
España se sitúa como líder mundial de turismo, alcanzando un gasto turístico extranjero de alrededor de 90.000 millones de euros y recibiendo, en el 2018, un total de 82.8 millones de turistas internacionales.
Por su parte, Perú recibió ese mismo año 4.4 millones de turistas internacionales, generando un gasto turístico de 4.300 millones de euros. Los esfuerzos de los últimos diez años de las autoridades peruanas para promover el turismo como uno de los principales sectores económicos del país están dando su fruto, posicionando a este como una de las fuerzas económicas más importantes del país.
En el caso del Uruguay, cerró el 2018 con un total de 3.711.948, cifra que casi iguala a la población del famoso “paisito”. Esto representó un ingreso de divisas de 2.154 millones de dólares. La actividad de cruceros es muy importante y los meses de verano son donde se genera el flujo más grande de turismo. El Ministerio de Turismo promueve tanto hacia dentro como hacia afuera la naturaleza del país bajo el claim: Uruguay Natural.
Estos estudios nos dan cifras de muuuuchos ceros que dejan clara la importancia que tiene el turismo para la subsistencia de la economía española y, desde hace unos años, para la peruana y uruguaya.
¿Cuáles son los aspectos negativos de vivir del turismo?
El turismo genera empleos de baja productividad; existe abundante empleo sumergido; y gran parte del empleo generado es de carácter temporal, consecuencia de la estacionalidad del producto.
En 2020 y en plena pandemia, a estos inconvenientes se le suma el cierre de fronteras y las diversas medidas restrictivas que llevan a cabo los países, ya sean estos receptores o emisores netos de turistas.
Esto está suponiendo un fuerte golpe en el sector turístico y por tanto en la economía de estos países, dejando a miles de personas desempleadas.
Mientras los políticos se dan la oportunidad (modo irónico on) de repensar la economía de nuestros respectivos países diversificando y promoviendo la I+D+i, nosotras te proponemos que hagas turismo interno, a fin que este sector no se vea tan afectado por la coyuntura actual.
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Aprovechando que hace unos días escribí sobre “Los veranos de los 90”, hablaré aquí de uno de mis lugares favoritos de esos veranos: la comarca de La Vera en Extremadura.
Siestas bajos las encinas; baños en gargantas, pozas y piscinas naturales de agua helada y cristalina procedente de la montaña; rutas de trecking; noches frías de verano; el mejor jamón del mundo; el famoso pimentón de La Vera; las migas, ¡ay las migas!; los pueblos y sus cascos históricos; segundas residencias de monarcas (y de Alejandro Sanz); historia, y como dice la canción “tierra de conquistadores”.
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He visto que se han reactivado los vuelos internos en el Perú y, si consideras que puedes darte una escapada sanadora, puedes irte a las playas del norte. A mi me encanta Zorritos donde siempre hay buen clima y estás frente al mar.
Cusco, siempre será mi destino favorito dentro del Perú porque sirve para recargar el alma. La energía recibida es espectacular; tienes un abanico de actividades por hacer y mucha comida rica. Las Salineras de Maras el mejor lugar.
En el caso del Uruguay, las playas del este son hermosas. Lo bueno de estar en un país pequeño es que puedes recorrerlo en auto. Así que, Piriápolis, Jose Antonio, Punta Ballena (uno de mis lugares favoritos), Punta del Este y Punta del Diablo son hermosos.
Si lo tuyo no va por la playa, entonces, Colonia del Sacramento es una tremenda opción.
Eso sí, viaja con precaución.
Foto tomada por Ali
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