Es una española como pocas. Si quieres que alguien te de un punto de vista diferente, llámala. Ella tiene una mirada profunda de las cosas y  una respuesta que siempre te hace reflexionar. Es pasional, al punto que si la conversación pasa a un siguiente nivel, ella defenderá su punto de vista. Le encanta el flamenco, pero no se le da muy bien ni cantarlo, ni bailarlo.

 

Como buena española, además de su claro ceceo, es la reina de los planes. Ella es feliz yendo de un lado a otro, picando algo por acá, riendo por allá y tomándose una copa de vino tinto junto a una buena conversación. Cualquier plan, le "mola".

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Es una en un millón porque es un ser tierno y sensible escondido detrás de su look bohemio. Defensora de las minorías, atenta a lo que realmente te pasa y amante de los abrazos y los detalles. Llora, cuando algo - que es casi siempre- le mueve las fibras del cuerpo. Es más, si le dices “te traje unas paltas”, se pone a llorar (Ama la palta y si es peruana, mejor). 

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Alicia es spinning - deportista, peruana de corazón, cantante de karaoke, reciente exploradora del yoga, viajera con mochila, amante de las caminatas a miles de metros de altura y poseedora de una risa muy particular.  Por donde va, deja huellas en el alma de quienes la conocen. La canción del millón de amigos de Roberto Carlos está inspirada en ella. 

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Su mirada crítica y sensible (no sé cómo lo hace) será muy enriquecedora en este blog.

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Alicia escribe desde Barcelona, España.

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