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Challenge y la no perspectiva de género

No han sido poco los challenges o retos a los que hemos sido nominadas durante el confinamiento a través de las redes sociales: foto de pequeña, con papá, en blanco y negro; alimentos con los que no podrías vivir; compartir recetas…¿en serio?; autorretratos simulando reconocidas obras de arte…y un largo etcétera que prometí que haría y que no hice.


Hasta el día que llegó EL RETO que estaba esperando: 30 días de canciones.


El desafío consistía en subir una canción a mis stories de Instagram, siguiendo la premisa que marcase el calendario musical: una canción de tu infancia; una canción que te haga feliz; una canción que te haga bailar...y así cada día durante 30 días.


Treinta días de emoción confinada. Alargaba el desayuno, aún más, para elegir la canción correcta y los 15 segundos exactos de melodía que te permite subir Instagram. Esperaba con ilusión las canciones que subían mis amigas, también nominadas, para ver si coincidíamos en gustos musicales o si compartían algo desconocido que me interesara añadir a mi playlist. (Lo que hace el aburrimiento).


Todo era bonito hasta que se me ocurrió hacer un balance (aburrimiento) de los grupos que había compartido: indie; clásica; rock; indie-pop; techno; blues; pop; fusión; Luis Miguel (no sé cómo catalogarlo); rap; jazz; country y rumba. Una gran variedad de género musicales. Hasta aquí todo bien.


Pero..., ¿qué pasa con el “otro” género?.


De esas 30 canciones que compartí, tan solo el 23% (sí, sigo aburrida) de ellas están interpretadas y/o compuestas por mujeres. Y aquí es donde empiezo a cuestionarme por qué en mi “biblioteca musical” hay tan pocos grupos de música liderados por mujeres. ¿Será que no me gusta la música que hacen las mujeres?...¿ein?, pero teniendo unos gustos musicales tan variados ¿cómo puedo pensar eso?.


Debe haber otros motivos por los que mi perspectiva de género en este challenge musical haya sido nula. Y como dice mi amiga Tere, no hay mejor forma de argumentar que dando datos. Así que allá vamos:


  • La industria musical está comprendida en “un 70% hombres y un 30% mujeres”.

  • “En Europa las compositoras registradas suman apenas un 20% del total.”

  • “En Estados Unidos tan solo el 15% de las discográficas son propiedad mayoritaria de mujeres”.

  • “De la lista de las 600 canciones más populares entre 2012 y 2017, solo el 22% fueron interpretadas por mujeres, y el 12% por compositoras.”

¿Te suenan los porcentajes? A mí me parece realmente impactante que se asemejen tanto al porcentaje de mi challenge.


Esta desigualdad no es una cuestión de gustos.


Estamos tan acostumbradas a que esto sea así que no nos lo cuestionamos y damos por hecho que no nos gusta la música que interpretan / componen mujeres. Pero, ¿cómo lo vamos a saber si no las hemos escuchado?


El primer paso para que esto cambie es reflexionar sobre esto. Done.

El segundo paso es darle visibilidad a la otra mitad de la población. Under Construction.


Yo te comparto una canción interpretada por Travis Birds y que contesta a los “19 días y 500 noches” de Sabina en su Tributo.


¿Me ayudas a conseguir la igualdad de género en mi biblioteca musical?



Foto: El Diario


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